Hay jugadoras que marcan goles, y hay otras que hacen historia.
Ana Gabriela Rodríguez, capitana de nuestro equipo femenino mayor, ha dejado una huella profunda por su entrega, determinación y amor por el club.
Desde 2017, cuando el proyecto apenas comenzaba, Gaby ha estado presente en cada paso de este camino. Ha visto como el sueño crecía, como nació Inter CF, y como el fútbol femenino del club se ha convertido en una verdadera familia.
A lo largo de estos años, su compromiso ha ido mucho más allá de la cancha. Además de ser jugadora y capitana, Gaby también es entrenadora de la categoría U14G y acompaña de cerca la preparación y formación de las categorías menores femeninas. Su presencia constante, su ejemplo y su manera de guiar inspiran a cada niña que da sus primeros pasos en el club.
Pero su liderazgo también se refleja dentro del campo: actualmente es nuestra máxima goleadora, y cada gol anotado es una muestra de su carácter competitivo, su determinación y su influencia en el equipo.
Conversamos con Gaby para conocer más sobre su historia, su mentalidad y el significado que tiene para ella haber crecido junto al club. En esta entrevista, nos habló sobre su recorrido, su papel como capitana y entrenadora, y la forma en que vive esta temporada junto al equipo.
Estás en el club desde el día uno, cuando todavía se llamaba Ciex Sports Academy, y hoy sigues siendo una de las jugadoras más importantes de Inter. ¿Qué significa para ti haber crecido junto al equipo, ver todo lo que han logrado con el paso de los años y formar parte de esta historia desde hace tanto tiempo?
Para mí significa muchísimo. He visto a la academia crecer desde cero, desde el día uno de entreno hasta lo que hoy somos, más que un club, me atrevo a decir que una familia. He vivido todas las etapas y momentos, tanto los malos como los buenos, y me llena de orgullo ver cómo hemos evolucionado. Crecer junto al equipo me ha formado como jugadora y también como persona.
Además de ser jugadora y capitana, también eres entrenadora de categorías menores en el club. ¿Cómo logras equilibrar esos tres roles y qué te motiva a seguir dando tanto dentro y fuera de la cancha?
No es fácil, pero lo hago con mucho amor y pasión. Cuando algo realmente te apasiona, no hay nada que te detenga y encuentras la manera de tener el tiempo y la energía para lograrlo. Ser entrenadora me permite transmitir lo aprendido a las más pequeñas. Verlas disfrutar, aprender y mejorar me motiva muchísimo. Es bonito saber que, de alguna manera, estoy aportando al futuro del club y del fútbol femenino.
Eres una jugadora determinante, polifuncional y con una garra que se nota en cada jugada: defiendes, atacas y no das una pelota por perdida. ¿Cómo logras transmitir esa energía y actitud al resto del equipo y mantener siempre la misma intensidad en cada partido?
Siempre me preparo mentalmente para competir al máximo. Trato de estar lo más tranquila y serena posible para lograr llegar lo más enfocada posible y llevar al equipo a su máximo nivel, que para mí es muy importante en estos momentos tan decisivos del torneo. El equipo sabe muy bien, y se los he dejado saber, que cuentan conmigo; donde me pongan, daré y haré lo mejor posible.
En un momento clave de la temporada, cuando el equipo pelea por la clasificación, diste un paso adelante y marcaste siete goles en un solo partido. ¿Qué hay detrás de esa mentalidad tan determinante con la que enfrentas los partidos decisivos, y cómo te preparas para rendir así y liderar al equipo en los momentos más importantes?
Detrás de eso hay mucha preparación mental y confianza en el trabajo que hacemos día a día. En los momentos decisivos me enfoco en disfrutar el partido, mantener la calma y dar lo mejor de mí.
Tus compañeras y quienes te conocen te describen como una persona humilde, trabajadora y con un gran corazón. ¿Qué valores intentas transmitirles a las chicas más jóvenes que te ven como ejemplo?
Siempre intento transmitir respeto, esfuerzo, compañerismo, humildad y compromiso.
A lo largo de ocho años en el club, seguro hay momentos que han dejado huella. ¿Cuál ha sido ese recuerdo o etapa que más te ha marcado como jugadora y persona?
El recuerdo que más me ha marcado fue cuando llegamos a la final. No logramos ser campeonas, pero fue una experiencia que me dejó muchas enseñanzas.
Además de ser una referente del club, sigues creciendo como deportista y como entrenadora. ¿Cuáles son tus metas a futuro dentro del fútbol?
Mis metas a futuro son seguir creciendo como jugadora y como entrenadora. Me gustaría seguir preparándome para poder aportar aún más al club y al fútbol femenino en general. Sueño con ver a más niñas cumpliendo sus metas, y si puedo ser parte de ese proceso, me sentiré muy orgullosa. Quiero seguir aprendiendo, compitiendo y dejando una huella positiva dentro y fuera de la cancha.
Hoy eres el ejemplo de muchas niñas que te ven no solo como jugadora, sino como líder y formadora. ¿Qué mensaje te gustaría dejarles a esas nuevas generaciones que vienen creciendo en el fútbol para que sigan persiguiendo sus sueños con la misma pasión y compromiso con que tú representas al club?
Que nunca dejen de creer en ellas mismas. El camino no siempre es fácil, pero con disciplina, humildad y pasió n todo se puede lograr. Que disfruten cada entrenamiento, cada partido y cada aprendizaje, porque todo eso las hace crecer.
Gaby ha crecido junto al club, lo ha visto transformarse y, al mismo tiempo, lo ha ayudado a crecer con su entrega y ejemplo. Su historia es la prueba de que los sueños se construyen con constancia y que el liderazgo se demuestra con hechos, no con palabras.
Más que goles, Gaby ha dejado una historia escrita con entrega y pasión. Su ejemplo seguirá guiando a las nuevas generaciones e inspirando a las niñas que comienzan a soñar con crecer en el fútbol.
